sábado, 15 de septiembre de 2012

CUIDA SUS OIDOS:

¡HEY! CUIDA SUS OÍDOS
 
Normalmente las orejas de un perro se mantienen relativamente limpias. Sin embargo cada perro necesita diferentes cuidados según su tipo de oreja, y definitivamente todos necesitan una revisión periódica.
Super Cachorros te recomienda que cada vez que acudas al veterinario le pidas que revise los oídos de tu perro y por lo menos una vez al mes le practique una limpieza de oídos. Limpiar las orejas de un perro es una tarea sencilla pero delicada. A continuación te presentamos información vital que te ayudará a cuidar mejor a tu perro.
Lo que nunca deberás hacer:
  • No apliques alcohol, agua ni ningún otro tipo de líquido, ya que pueden lastimar su oído.
  • No introduzcas en sus oídos cotonetes o instrumentos ya que pueden lastimar el oído medio o interno.
  • No intentes limpiar los oídos de tu perro si no sabes o no estás seguro de cómo hacerlo.
  • No hagas caso a “recetas de la abuelita”. Siempre deberás consultar con un veterinario, antes de aplicar cualquier tratamiento en tu perro. Es muy fácil dañar el oído de un perro.
Problemas comúnes:
Aunque nunca nos lo hayan dicho, los problemas de oído en los perros son muy comúnes. De hecho representan aproximadamente el 20% de las consultas veterinarias. Los principales problemas pueden originarse debido a :
  • Alergias
  • Cuerpos extraños que se internan en el oído (pasto, semillas, polen, etc)
  • Microorganismos como hongos o bacterias
  • Insectos como hormigas o garrapatas
  • Exceso de humedad
  • Condición genética
  • Ácaros
Conoce las orejas de tu perro y revísalas semanalmente. Así aprenderás a darte cuenta cuando algo anda mal. Para revisar las orejas de tu perro, basta con asomarte a su canal auditivo y revisar la piel de su oreja. Un simple vistazo puede salvar el oído de tu perro.
Mientras más pronto detectemos alguna anomalía relacionada con los oídos de nuestro perro, más sencillo y corto será el tratamiento. Pon especial atención a las siguientes señales:
  • Si se rasca constantemente la base de los oídos o el interior de las orejas.
  • Si sacude con frecuencia la cabeza.
  • Si intentas revisar su oreja y tu perro no lo permite o se molesta (es probable que se deba al dolor).
  • Si notas que pierde el equilibrio.
  • Si notas que ladea mucho su cabeza.
  • Si notas pequeñas manchas o puntos de sangre en la piel de la oreja.
  • Si notas un exceso de cerumen.
  • Si notas que algún objeto o cuerpo extraño se introdujo en su oreja.
  • Si percibes alguna secreción.
  • Si notas inflamación.
Prevención:
Las mejores prácticas para prevenir infecciones, inflamación y problemas de oído en tu Super Cachorro son:
  • Evitar que sus oídos se mojen y en caso de que el perro nade, secarlos muy bien.
  • Llevarlo con el veterinario a una revisión y limpieza mensual.
  • Conocer y revisar las orejas de tu perro todas las semanas.
  • Si tu perro pasa mucho tiempo en exteriores o jugando en el parque, es importante la revisión constante de oídos para ver si no tiene pasto, tierra, semillas o algún tipo de objeto extraño dentro que pueda ocasionar una infección.
  • Minimizar el cuidado de los oídos puede traer graves consecuencias como infecciones y daños al aparato auditivo que llegan a ser muy difíciles de curar e incluso irreversibles.